Cuarta Entrada: La rigurosidad del equilibrio (espacio y materia)
El mundo arquitectónico de diseño ambiental se basa en la lectura de dos componentes complejos que se perciben dentro de un espacio. La arquitectura consiste en la transformación de un área a un espacio diseñado para ser habitado por el ser humano. Los dos aspectos que cada estructura tiene son los sistemas espaciales y materiales. Se asocia el sistema espacial con los elementos organizadores entre volúmenes que son parte de la experiencia y recorrido de un espacio. Este sistema a su vez se subdivide. Tiene sus elementos fundamentales con los cuales se construye el espacio: paredes, aperturas, base, columnas, etc. El otro grupo de elementos son los variables. Si con los fundamentales transformas físicamente el ambiente, lo variable se refiere a los elementos que emiten sensaciones particulares, lo abstracto que crea la dimensión artística y memorable del ambiente. La contraparte de lo artístico en la arquitectura es lo racional, la parte calculadora que todo arquitecto esencialmente debe estudiar; se conoce como el sistema material. Detrás de los elementos fundamentales, están las leyes fundamentales del mundo físico y es solo a través del cumplimiento de las mismas que la visión artística se puede lograr. El sistema material es variante entre proyectos, gustos del arquitectos y peticiones del cliente. Siempre debe cumplir la función de proteger contra el mundo exterior, controlar su impacto hacia el interior del espacio, ya sea ventilación visibilidad, o transferencia de energía y sonido. Encima de todo esto, la obligación del sistema y sus cálculos matemáticos para sujetar la estructura y mantenerla en equilibrio. Mas allá del diseño, el equilibrio en la arquitectura es lo más importante. Se necesita balancear los sistemas materiales (el edificio se cae si no se calcula el equilibrio) y sistemas espaciales (no da emoción ni crea alguna sensación particular). También es importante reconocer que un sistema rige al otro. En esencia hay que crear una línea fina pero aún reconocible entre los dos.
Crear un balance entre la expresión artística y la expresión racional que se refleja en todos los diseños es subjetivo. Cada arquitecto respectivamente se encarga de reconocer sus gustos y desarrollar su estilo de diseño que crea la proporción por la cual los dos sistemas se van a revelar en el modelo. Puedes inclinarte hacia la belleza escultórica con la cual diseñas tu espacio, así como Frank Gehry o el reconocido Santiago Calatrava. El otro extremo entonces es la racionalidad calculada, sencilla plena y segura pero con su elegancia sutil adquirida por la pureza geométrica como lo es un Tadao Ando o Lina Bo Bardi. Aunque sea subjetiva la proporción, es importante que la esencia de la carrera no se pierda. La arquitectura se rige mediante la combinación de la belleza, estabilidad y la funcionalidad.
Estos sistemas son interdependientes dentro de una estructura. Hay casos estilísticos que se destacan por dejar ambos sistemas descubiertos. El sistema material puede incorporarse al diseño y esto le da un carácter innovador. Se conoce como la arquitectura high tech. Aparte de esto, lo más común en la mayoría de los proyectos es encubrir el esqueleto del edificio. El sistema material de la estructura funciona como líneas guías para la capa de ornamentación que va construyendo la fachada del edificio. Algunos proyectos de la arquitecta Zaha Hadid como el Centro Heydar Aliyev en Azerbaijan es reconocido por su composición orgánica la cual es solo lograda por la unión de vigas dobladas hasta lograr la forma y luego se cubre por completo para simular que el curvatura se logró únicamente con hormigón, lo cual el sistema material y la física indica no ser posible. Se usa el sistema material para solucionar los problemas particulares del diseño artístico para que puedan ir a la par y sea un proyecto exitoso al poder llevarse a gran escala.
En la arquitectura siempre va a existir el encuentro entre el sistema espacial y material. y mientras más se mezclen y más se conecten, más se desaparecen en la estructura. El ojo y la mente humana son perceptivos e intuitivos— crean conexiones y rellenan lo vacío. Para la experiencia arquitectónica esto es algo maravilloso, porque por más nuevo que sea el espacio para uno, la lectura del mismo se va a ir construyendo y permite que explore el ambiente adecuadamente. Aunque la sensación de confusión se siente, es abacorada por asombro y uno se siente que pertenece en el espacio, siempre y cuando sean las intenciones del arquitecto.
Referencias
Forster, Danny. Vimeo, 19 Dec. 2020, vimeo.com/315279775.
Unwin, Simon. Analyzing Architecture
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